Si estás leyendo esto, seguramente sea debido a que te ocurre lo mismo que a otras muchas personas tras hacer el cambio de iluminación convencional a LED: las luces permanecen encendidas cuando se apaga el interruptor. ¿Cómo es eso posible si con las antiguas bombillas no tenía ningún problema? En un primer momento podemos pensar que el problema está en los LEDS, ya que antes no tenía ese problema. Nada más lejos de la realidad, el problema está en la instalación eléctrica y ya existía de antemano.
EXPLICACIÓN DEL FENÓMENO
Al principio puede resultarnos extraño oír que el problema está en nuestra instalación y no en las luminarias. Si el problema es de la instalación, ¿Cómo no lo hemos detectado antes? Pues bien, la respuesta es sencilla: Porque las luces incandescentes/fluorescentes son mucho menos eficientes que las LED y no se encienden al recibir pequeñas corrientes parásitas. Antes de nada, debemos tener claro que una bombilla no se va a encender si no está recibiendo corriente. Por lo tanto, si una lámpara que debería estar apagada sigue con luz, es debido a que le está llegando una corriente residual no deseada.
CAUSAS DE LAS CORRIENTES PARÁSITAS
Ahora que sabemos qué provoca los encendidos no deseados, debemos identificar la fuente del problema. Lamentablemente, no hay una única respuesta para esto. Los motivos más habituales por los que puede estar llegando una corriente no deseada a las lámparas son:
- Que los interruptores tengan un testigo luminoso. En ese caso el testigo deja circular hacia los leds una pequeña tensión que provoca el encendido. La solución pasa por sustituir el interruptor por uno normal (o con testigo fosforescente)
- Que el interruptor esté cortando el neutro en vez de la fase. Los interruptores siempre deben de cortar el cable de fase, pero a veces los hilos están intercambiados y se está cortando el neutro. En ese caso se deben intercambiar los cables para que el interruptor corte el correcto.
- Que el interruptor, debido al desgaste, deje pasar una pequeña tensión hacia los leds. En ocasiones ocurre que los interruptores con mucho uso acaban deteriorándose y no cortan del todo la tensión, dejando pasar una pequeña corriente hacia el led. En ese caso se debe sustituir el interruptor por uno nuevo.
- Que haya corrientes parásitas en el neutro de su instalación. Estas corrientes suelen provenir de algún electrodoméstico o motor que haya en la instalación y que presenta fugas. Lo más aconsejable es identificar la fuente del problema para solucionarlo. En caso de no poder eliminarlo, lo que se puede hacer es sustituir los interruptores unipolares por interruptores bipolares o instalar en paralelo con las bombilla un dispositivo antiparpadeo que absorba dichas tensiones, tal como se muestra en la imagen.
Por último, cabe destacar que aunque estas pequeñas corrientes no deseadas producen un consumo muy bajo, siempre es mejor detectar su origen para eliminarlas; en caso contrario, pueden acabar dañando los aparatos electrónicos o ir en aumento y ser cada vez más molestas.
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